El pasado viernes 3 de marzo, nuestra compañera Mª Ángeles Marín se despedía de sus compañeros y alumnos después de una vida dedicada a la docencia. Todos los que hemos coincidido con Mª Ángeles destacamos de ella su buen juicio y capacidad de análisis y mediación en distintas situaciones.
Su dulzura y bondad, han marcado la vida del centro, pues es una de las pocas profesoras que han estado en él desde el día de su inauguración. Le deseamos un merecido descanso y esperamos que su sonrisa y su buen caracter hayan quedado grabados en nuestra memoria y quehacer cotidiano.
Recibe un fuerte abrazo compañera, gracias por todo.