Una vez al trimestre el profesorado se reúne para formarse sobre asuntos relacionados con el Programa Ecoescuelas. En la reunión del 19 de mayo se hizo un balance del desarrollo de este Programa en el curso 2015-16. Además, el profesor Manuel Quirós expuso sus impresiones sobre el sistema educativo finlandés tras la realización de un curso en aquel país cuyo modelo educativo puede servirnos de ejemplo en muchos aspectos. Seguidamente se proyectó un vídeo sobre el fomento de la creatividad y se dialogó sobre la forma de incorporar la innovación educativa al Instituto. El profesor Octavio Martínez planteó la posibilidad de aplicar los nuevos enfoques en asignaturas tipo taller a impartir en 1ºESO, 2ºESO y 3ºESO en la hora semanal de libre disposición; se acordó que durante las próxima semanas el profesorado interesado propondrá talleres concretos para el curso 2016-17.

Balance del Programa Ecoescuelas en el La Madraza durante el curso 2015-16.

  

  • Ha sido un año fructífero en el que el Programa se ha consolidado: todo el alumnado lo conoce, sabe qué se pretende y muchos se identifican con él. 
  • Se mantiene el Concurso Ecoaula que sirve de medida de cómo están las aulas y estimula su cuidado. Gracias a los miembros del jurado, especialmente a Concepción García, Mª Ángeles Marín, Montserrat López, Silvia Román, David Parra y Francisco J. García.
  • Hemos completado las etapas de trabajo propias de este Programa dedicadao este año a los residuos.
    • La primera etapa o ecoauditoría tuvo lugar en el primer trimestre bajo la dirección del profesorado del área científica. Esta es una etapa de investigación en la que hubo más participación del alumnado que en el curso anterior.
    • En la fase de recogida de propuestas de mejora por parte de las clases destacamos el papel de los delegados de clase y de las tutoras y tutores, a quienes agradecemos también las tutorías dedicadas a la concienciación ambiental, todo ello coordinado por nuestro orientador.
    • A partir de estas propuestas se han elaborado dos documentos bajo la dirección del Comité Ambiental: el Código de Conducta, del que estamos especialmente satisfechos tanto por el fondo como por la forma, y el Plan de Acción que recoge medidas concretas en relación con los residuos. Algunas de ellas ya están en vigor y otras todavía no: concienciación (tutorías, cartelería), reducción de fotocopias, bandeja de papel usado por una sola cara en cada aula, envoltorios ecológicos para el desayuno, fomento del consumo de fruta en el recreo, instalación de contenedores, turnos de limpieza y reciclaje, compra de papel reciclado, Concurso Ecoaula, inserción del tema de los residuos en el curriculum de varias asignaturas (tecnología, idiomas, biología, sociales).
  • Además celebramos el Día de la Ecoescuela, un día de convivencia y de sensibilización en el que tuvieron un protagonismo especial los padres y madres, unos son miembros habituales del Comité Ambiental y otros se sumaron en esta jornada. La mayoría tienen hijos en 1ºESO y están dispuestos a seguir apoyándonos en los próximos cursos.
  • El Comité Ambiental es ya un órgano consolidado que se ha reuniod en nueve ocasiones con un ritmo de trabajo bastante eficaz. Lo integran 7 representantes del alumnado, 4-5 de las familias, los cuatro coordinadores de área, el orientador, la secretaria, la jefa de estudios y la representante del Aula Específica. Lamentablemente poco hemos podido disfrutar del responsable de Formación e Innovación Educativa Ignacio Mendiguchía, de baja por accidente.
  • El año que viene debemos consolidar las medidas ya implantadas y afrontar un nuevo núcleo temático: la energía o el agua. Elegiremos uno de estos temas e intentaremos que el Instituto mejore en ese aspecto a lo largo del año. Se puede vota votar online sobre la opción preferida.
  • Todavía somos una ecoescuela novel, pero la Secretaría del Programa Ecoescuelas y el Centro de Profesorador nos han felicitado repetidas veces por nuestros avances. Seguimos en camino, con muchas cosas que mejorar (por ejemplo, los problemas con los turnos de limpieza de las últimas semanas). Los objetivos de la ecoescuela nos inspiran continuamente aunque no la mencionemos expresamente: ocurre cuando decoramos aulas y pasillos con los trabajos de clase, cuando fomentamos la investigación y el trabajo en equipo, cuando dirigimos la atención a los problemas de nuestro entorno, cuando organizamos salidas y actividades extraescolares y, por supuesto, cuando promovemos un clima cordial y de respeto entre todos.

BALANCE DEL PROGRAMA ECOESCUELAS PARA LA SESIÓN FORMATIVA DEL DÍA 19 DE MAYO DE 2016.

 

La sesión formativa del Programa Ecoescuelas del tercer trimestre no está dedicada específicamente a cuestiones ambientales, pero ya sabemos que este Programa tiene multitud de ramificaciones y posibilidades de mejorar otros aspectos del Instituto. Hoy tendremos oportunidad de escuchar experiencias y reflexiones inspiradoras. Pero, antes, un balance de nuestro segundo curso como ecoescuela.

 

        Ha sido un año fructífero en el que el Programa se ha consolidado: todo el alumnado lo conoce, sabe qué se pretende y muchos se identifican con él. 

        Se mantiene el Concurso Ecoaula que sirve de medida de cómo están las aulas y estimula su cuidado. Gracias a los miembros del jurado, especialmente a Concha, Mª Ángeles, Montse, Silvia, David y Paco y Silvia.

        Hemos completado las etapas de trabajo propias de este Programa, en este año sobre los residuos.

o   La primera etapa o ecoauditoría tuvo lugar en el primer trimestre bajo la dirección del profesorado del área científica. Ésta es una etapa de investigación en la que hubo más participación del alumnado que en el curso anterior.

o   En la fase de recogida de propuestas de mejora por parte de las clases destacamos el papel de los delegados de clase y de las tutoras y tutores, a quienes agradecemos también las tutorías dedicadas a la concienciación ambiental, todo ello coordinado por nuestro orientador.

o   A partir de estas propuestas se han elaborado dos documentos bajo la dirección del Comité Ambiental: el Código de Conducta, del que estamos especialmente satisfechos tanto por el fondo como por la forma, y el Plan de Acción que recoge medidas concretas en relación con los residuos. Algunas de ellas ya están en vigor y otras todavía no: concienciación (tutorías, cartelería), reducción de fotocopias, bandeja de papel usado por una sola cara en cada aula, envoltorios ecológicos para el desayuno, fomento del consumo de fruta en el recreo, instalación de contenedores, turnos de limpieza y reciclaje, compra de papel reciclado, Concurso Ecoaula, inserción del tema de los residuos en el curriculum de varias asignaturas (tecnología, idiomas, biología, sociales).

        Además celebramos el Día de la Ecoescuela, un día de convivencia y de sensibilización en el que tuvieron un protagonismo especial los padres y madres, unos son miembros habituales del Comité Ambiental y otros se sumaron en esta jornada. La mayoría tienen hijos en 1ºESO y están dispuestos a seguir apoyándonos en los próximos cursos.

        El Comité Ambiental es ya un órgano consolidado y con un ritmo de trabajo bastante eficaz. Recuerdo que lo integran 7 representantes del alumnado, 4-5 de las familias, los cuatro coordinadores de área, el orientador, la secretaria, la jefa de estudios, la representante del Aula Específica… lamentablemente poco hemos podido disfrutar al responsable de Formación e Innovación Educativa Ignacio Mendiguchía.

        El año que viene toca consolidar las medidas ya implantadas y afrontar un nuevo núcleo temático: la energía o el agua. Elegiremos uno de estos temas e intentaremos que el Instituto mejore en ese aspecto a lo largo del año.

        Todavía somos un centro novel, otros llevan décadas, pero la Secretaría del Programa Ecoescuelas y el CEP nos han felicitado por nuestros avances.  Nosotros seguimos en camino, con muchas cosas que mejorar (por ejemplo, los problemas con los turnos de limpieza de las últimas semanas). Los objetivos de la ecoescuela nos inspiran aunque no la mencionemos expresamente; ocurre cuando decoramos aulas y pasillos con los trabajos de clase, cuando fomentamos la investigación y el trabajo en equipo, cuando dirigimos la atención a los problemas de nuestro entorno, cuando organizamos salidas y actividades extraescolares o cuando promovemos un clima cordial y de respeto entre todos.