Las primeras observaciones las realizamos en los alrededores del centro de visitantes y su objetivo es concentrar la atención del alumnado en la naturaleza que le rodea. Primeramente se explica qué es un Parque Natural. Seguidamente se aclara que la vegetación dominante, el pinar, es resultado de una repoblación; es fácil llegar a esta conclusión observando los pinos que están plantados en fila. A continuación, se completa una ficha comparativa sobre varias especies (pino, encina, olivo...) y se utiliza una clave dicotómica para distinguir diferentes especies de pinos. También se invita al alumnado a observar rastros de la presencia de animales (piñas comidas, hozaderos de jabalíes...).
A las 10:00 se abren las puertas del centro de visitantes y realizamos el recorrido por sus salas dedicadas a la biología, la geología y las relaciones del ser humano con el monte.

El sendero se inicia junto al panel informativo que aparece a la derecha. La lectura en voz alta del panel ayuda a hacerse una idea del recorrido y a plantear qué se espera del alumnado a lo largo del sendero.
Inicialmente el camino discurre cuesta abajo entre pinos, olivos asilvestrados, encinas, cedros, retamas, romero, aulaga, enebros, rosales silvestres, zarzamoras, torviscas, tomillo, jara blanca, lavanada, etc. Nos detenemos para observar algunas de estas especies y realizar calcos  de hojas.

A unos 10 minutos de iniciar el sendero aparece a la derecha una zona llana con cedros, nogales, higueras... (tal vez un antiguo huerto). Este es un buen lugar para encargar una búsqueda por equipos: se muestran y se explican una serie de objetos de la naturaleza (sobre los sistemas de reproducción de cada planta, sobre los rastros de animales que normalmente no se dejan ver, sobre la naturaleza de las rocas, sobre las basuras, sobre la edad de los elementos, sobre coger cosas sin dañar ninguna planta...). A continuación, se concede un tiempo a los equipos para que busquen esos objetos. Posible lista de objetos: piedra negra, piedra clara, palo, corteza cubierta por liquen amarillo, corteza de pino, ramita con hoja secas de cedro, piña de pino, piña de cedro (o sus escamas), piña de pino comida por ardilla, fruto de retama, fruto de jara, fruto de rosal silvestre, excremento de cabra, excremento de conejo, basura. Guardamos semillas en sobres para su posterior siembra en el Instituto.

Se puede aprovechar esta zona para tomar un bocadillo a media mañana.

Poco más adelante el camino atraviesa un arroyo y el sendero se vuelve ascendente. Se pueden realizar algunas paradas para orientarse y completar el croquis del itinerario, para ver marcas de pájaros carpinteros en los troncos, para contar los anillos de los torncos cortados, para ver rastros de jabalíes... Si el ambiente grupal lo permite, se recomienda hacer un minuto de silencio y realizar el ejercicio "mapa de los sonidos".

El camino sube hasta un collado en el que se encuentra con un carrril. Aqui nos detenemos antes de proseguir el ascenso a mano derecha. El lugar elegido para esta parada es un pinar adecuado para jugar a una variante de lazarillos y ciegos en la que el ciego es conducido a un árbol que luego, ya con los ojos abiertos, tiene que encontrar en el bosque.

ASCENSO AL CERRO DEL MAÚLLO.

Esta última parte del camino es la de mayor pendiente y conviene hacer breves paradas parar descansar y, de camino, para admirar el paisaje; también se puede aprovechar la abundancia de lavanda y salvia para hablar de las plantas aromáticas y de las adaptaciones de las plantas a la sequedad.
Al llegar a las trincheras hay que dar una serie de normas de seguridad al alumnado para evitar accidentes. Es importante explicar la función de las trincheras durante la Guerra Civil y reflexionar sobre lo que tuvo que suponer esta guerra para las gentes de la zona. Después de realizar un recorrido todos juntos por las trincheras, interpretando la función de cada construcción, realizamos dos actividades relacionadas con el paisaje que se ve desde el Cerro del Maúllo: